Post by Club Fans Jaime Camil España on Jul 10, 2007 19:23:11 GMT 1
9 de julio 07
Fuente: Reforma
Gracias a Laura González de México, por la nota.
Con nervios y la presión de llenar el Garfio que dejó Jaime Camil fue como Freddy Ortega atracó en el País de Nunca Jamás para interpretar al temido Capitán de la obra Peter Pan.
Al final de su primer viaje, el Mascabrother logró relajarse y disfrutar de lo que una primera función provoca en los actores.
"Estuve más nervioso que nunca porque es una obra infantil, pero sobre todo porque es un musical, la verdad es que sí me paró de uñas.
"La primera función fue mi ensayo general, y en la segunda me sentí mucho más tranquilo y pude jugar más con los tonos... al final de mi actuación se me erizó la piel", confesó al término de la puesta.
Con todo y la adrenalina que provoca estrenar un personaje y, sobre todo, después de la ovación con la que el público lo despidió del escenario, Freddy no olvida que tiene un reto muy fuerte por delante.
"Cuando vi por primera vez la obra pensé: 'quien fuera Jaime para hacer a Garfio' y ahora aquí estoy, por eso trataré de hacer una interpretación propia, porque con Jaime me quito el sombrero, tengo una responsabilidad muy grande".
No sólo eso, sino que esta nueva aventura también implica entrar a terrenos que nunca antes había explorado: el canto y el público infantil.
"Nunca había cantado y la verdad es que era muy fácil grabar el tema y hacer playback, pero Jorge D'Alessio me dijo: 'te apoyo, pero la comedia musical se canta en vivo' entonces decidí intentarlo, ahora me siento muy bien porque no se me olvidó la letra, eso es maravilloso.
"La diferencia (entre público infantil y adulto) es el tono que le pongas, hay cosas que te van saliendo, pero también hay una autocensura, hay 20 mil cosas que si estuviera en cabaret quedarían de pechito, pero aquí lo importante es captar la atención del niño, que es muy difícil", explicó el comediante.
Instalado en el camarote de Capitán Garfio, Freddy se dispone a atracar en el País de Nunca Jamás durante seis semanas, tiempo en el que buscará salvar energía para su show nocturno.
Fuente: Reforma
Gracias a Laura González de México, por la nota.
Con nervios y la presión de llenar el Garfio que dejó Jaime Camil fue como Freddy Ortega atracó en el País de Nunca Jamás para interpretar al temido Capitán de la obra Peter Pan.
Al final de su primer viaje, el Mascabrother logró relajarse y disfrutar de lo que una primera función provoca en los actores.
"Estuve más nervioso que nunca porque es una obra infantil, pero sobre todo porque es un musical, la verdad es que sí me paró de uñas.
"La primera función fue mi ensayo general, y en la segunda me sentí mucho más tranquilo y pude jugar más con los tonos... al final de mi actuación se me erizó la piel", confesó al término de la puesta.
Con todo y la adrenalina que provoca estrenar un personaje y, sobre todo, después de la ovación con la que el público lo despidió del escenario, Freddy no olvida que tiene un reto muy fuerte por delante.
"Cuando vi por primera vez la obra pensé: 'quien fuera Jaime para hacer a Garfio' y ahora aquí estoy, por eso trataré de hacer una interpretación propia, porque con Jaime me quito el sombrero, tengo una responsabilidad muy grande".
No sólo eso, sino que esta nueva aventura también implica entrar a terrenos que nunca antes había explorado: el canto y el público infantil.
"Nunca había cantado y la verdad es que era muy fácil grabar el tema y hacer playback, pero Jorge D'Alessio me dijo: 'te apoyo, pero la comedia musical se canta en vivo' entonces decidí intentarlo, ahora me siento muy bien porque no se me olvidó la letra, eso es maravilloso.
"La diferencia (entre público infantil y adulto) es el tono que le pongas, hay cosas que te van saliendo, pero también hay una autocensura, hay 20 mil cosas que si estuviera en cabaret quedarían de pechito, pero aquí lo importante es captar la atención del niño, que es muy difícil", explicó el comediante.
Instalado en el camarote de Capitán Garfio, Freddy se dispone a atracar en el País de Nunca Jamás durante seis semanas, tiempo en el que buscará salvar energía para su show nocturno.